Nuevamente la temporada invernal azota la ciudad de los puentes al norte del departamento.
Más de 1000 personas que conforman un aproximado de 280 familias de la zona rural y el casco urbano pasaron la noche en casa de vecinos y albergues del municipio por la inminente creciente de la máxima arteria fluvial del País.
Los sectores afectados en la zona urbana son los tradicionales de Pacho Mario y Panchigua, recordemos que esta zona es habitada por los pescadores y vendedores informales, no obstante otros barrios se encuentran evacuados por el riesgo que presentan como son Caracolí, Planadas, Cascajal, y Bodega Sur.
La zona rural se encuentra en monitoreo constante más exactamente las veredas Isla de Corea, Perico Mesuno donde unas 60 familias se encuentran bajo la protección de la administración municipal.
El llamado que hacen los hóndanos al gobierno departamental es la pronta ayuda para estas familias con alimentos no perecederos, colchonetas, pañales, leche en tarro, carpas para instalar albergues y suministros médicos que ya empiezan a escasear.
De igual forma las autoridades se han visto cortos en materia de seguridad por que como reza el adagio popular ‘En río revuelto, ganancia de pescadores’, los amigos de lo ajeno ya empezaron a hacer de la suyas, mientras las familias huyen de sus viviendas dejándolo todo atrás por miedo a la muerte otros ingresan a sus casas y las desvalijan.
La administración municipal ha dispuesto de 4 albergues pero estos no han dado abasto para todas las personas que están llegando de diferentes puntos del municipio.
La ultima emergencia que resistieron los hóndanos fue el pasado mes de Marzo cuando el río Güalí arrasó con gran parte del Centro histórico de la municipalidad.
Más de 1000 personas que conforman un aproximado de 280 familias de la zona rural y el casco urbano pasaron la noche en casa de vecinos y albergues del municipio por la inminente creciente de la máxima arteria fluvial del País.
Los sectores afectados en la zona urbana son los tradicionales de Pacho Mario y Panchigua, recordemos que esta zona es habitada por los pescadores y vendedores informales, no obstante otros barrios se encuentran evacuados por el riesgo que presentan como son Caracolí, Planadas, Cascajal, y Bodega Sur.
La zona rural se encuentra en monitoreo constante más exactamente las veredas Isla de Corea, Perico Mesuno donde unas 60 familias se encuentran bajo la protección de la administración municipal.
El llamado que hacen los hóndanos al gobierno departamental es la pronta ayuda para estas familias con alimentos no perecederos, colchonetas, pañales, leche en tarro, carpas para instalar albergues y suministros médicos que ya empiezan a escasear.
De igual forma las autoridades se han visto cortos en materia de seguridad por que como reza el adagio popular ‘En río revuelto, ganancia de pescadores’, los amigos de lo ajeno ya empezaron a hacer de la suyas, mientras las familias huyen de sus viviendas dejándolo todo atrás por miedo a la muerte otros ingresan a sus casas y las desvalijan.
La administración municipal ha dispuesto de 4 albergues pero estos no han dado abasto para todas las personas que están llegando de diferentes puntos del municipio.
La ultima emergencia que resistieron los hóndanos fue el pasado mes de Marzo cuando el río Güalí arrasó con gran parte del Centro histórico de la municipalidad.
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